Esta entrada del blog está basada en un trabajo de María Cruz Villalón que me ha parecido muy interesante, porque analiza las dificultades en la construcción del puente < que fueron muchas y gordas> además de los problemas técnicos descritos con detalles desconocidos para muchos mortales.
Para empezar a plantear la construcción del puente además de los ·mensores" o topógrafos romanos, seguro que necesitaron unos expertos en ríos que se sentaban en la orilla en las cuatro estaciones para ver las subidas ,bajadas y desbordamientos o sequías del cauce.
La posición elegida para construir el puente parece que se decidió sólo por ser el más apropiado de la zona, además de comunicar con una calzada que se encuentra a 200m. del puente y que se dirige a otro que ya no existe, que fue el de Alconetar a 45 Km. andando, en una zona en la que el Tajo se ensancha con una obra de considerables dimensiones y construcción difícil. Hubo un proyecto de restauración para el en el s.XVIII firmado por Joseph Garzia Galiano pero se quedó en eso en proyecto.
Seguimos con la ubicación de nuestro puente; seguramente tenía sus ventajas pero inconvenientes también sobre todo por lo complicado del terreno, está en un ángulo muy profundo formado por el cauce del río.este es el motivo de su diseño relativamente corto pero con mucha altura por lo que el coste de los materiales debió ser mayor que en otras obras aparentemente mayores.
Un dato curioso es que sólo el pilar central y el siguiente hacia el norte estaban permanentemente en el agua incluso en verano los demás estaban en seco excepto en las crecidas, que en invierno hacían subir las aguas muy rápido, pero aquellos que miraron sentados en la orilla lo hicieron bien y nunca pasó de la cota que se habían calculado, buen ojo el de estos observadores.
Resultado; 47m. de altura en el centro y 28,6m. y 27,35m. para los arcos centrales. Tiene un perfil muy diáfano y una elegancia propia de un maestro que supo acoplar la diferencia de diseño de cada elemento con el todo y con la irregularidad del terreno.
Hasta 1969 cuando comenzó la construcción de la presa del embalse de Alcántara, no se supo con seguridad la composición de los cimientos de las pilas. La base misma de las pilas descansaba sobre la roca tallada y su centro es de hormigón revestido por los sillares que forman los pilares.
Ahora las dudas se plantean en saber la manera en que desecaron el cauce para poder tallar y cimentar
No hay comentarios:
Publicar un comentario